La presión intraocular (PIO) es la fuerza del líquido interno del ojo contra sus paredes. Se mide con tonometría, un examen rápido e indoloro. Conocer tu PIO es clave para descartar glaucoma y vigilar otras condiciones. En esta guía verás qué es la PIO, valores orientativos, factores de riesgo y qué hacer si la PIO está alta o baja. También explicamos los exámenes complementarios (paquimetría, OCT, campo visual) y cómo se decide el seguimiento. Si necesitas medirla o interpretar un resultado previo, agenda tu examen por WhatsApp y te orientamos en 2 minutos.


¿Qué es la PIO y cómo se mide?

  • PIO: presión del humor acuoso dentro del ojo. Mantiene la forma del globo ocular y su función óptica.
  • Tonometría: métodos más comunes en clínica
    • No contact (aire): soplo breve de aire; orientativa, útil como tamizaje.
    • Aplanación (Goldmann): estándar de referencia en consultorio; requiere gota anestésica y contacto suave.
    • Rebote (iCare): contacto mínimo, útil en niños y monitoreo.
  • Paquimetría: mide grosor corneal; corrige/ contextualiza la PIO (córneas muy gruesas o delgadas pueden sesgar la lectura).

Duración del examen: 5–10 minutos (ambos ojos).


Valores orientativos y factores que los modifican

  • Rango habitual: 10–21 mmHg (milímetros de mercurio).
  • La interpretación no es aislada: edad, grosor corneal (paquimetría), hora del día, medicación, miopía alta, inflamación, trauma, cirugía reciente y antecedentes familiares influyen.
  • PIO alta no siempre significa glaucoma; glaucoma es un daño del nervio óptico que puede ocurrir con PIO alta o incluso con PIO «normal» (glaucoma de presión normal).

Por eso, ante un valor elevado o sospechoso se solicitan pruebas complementarias y seguimiento.


¿Qué hacer si tu PIO está alta o baja?

  • PIO elevada (por encima del rango o asimetría marcada entre ojos):
    • Repetir medición y verificar paquimetría.
    • Solicitar OCT de nervio óptico/mácula y campo visual para evaluar daño funcional y estructural.
    • Evaluar ángulo iridocorneal (biomicroscopía/gonioscopía).
    • Definir frecuencia de controles y, si corresponde, iniciar tratamiento según criterio médico.
  • PIO baja (hipotonía):
    • Puede relacionarse con fuga de humor acuoso, inflamación o posquirúrgico. Requiere evaluación clínica.

Exámenes complementarios habituales

  • Paquimetría corneal: grosor de la córnea; contextualiza la PIO.
  • OCT de nervio óptico: analiza fibras nerviosas; detecta daño temprano.
  • Campo visual computarizado: mide sensibilidad visual; detecta pérdidas periféricas.
  • Fotografía de papila: registro para comparación a lo largo del tiempo.
  • Gonioscopía: valora apertura del ángulo (riesgo de cierre/ataque).

Preguntas frecuentes (mini‑FAQ)

  • ¿Duele medir la PIO?
    No. En aplanación se usa una gota anestésica y el contacto es suave; en aire/rebote la molestia es mínima.
  • ¿Por qué mis resultados varían?
    La PIO fluctúa y depende de la técnica, la hora y el grosor corneal. Por eso siempre interpretamos en conjunto.
  • ¿PIO alta = glaucoma?
    No necesariamente. El diagnóstico depende de nervio óptico, OCT y campo visual, además de la PIO.
  • ¿Cada cuánto debo medirla?
    Según tu riesgo: anual en controles generales; más frecuente si hay antecedentes familiares, miopía alta o hallazgos previos.
  • ¿El tratamiento baja la PIO para siempre?
    Los medicamentos/procedimientos controlan la PIO; requieren seguimiento y ajuste por el especialista.